IV SuperDuelo. Partido 6
El efecto M revitaliza a Circo Aragonés
"¿Su equipo tiene problemas de circulación?. ¿Sufre de impotencia ante la portería rival?. ¿Problemas de ansiedad cuando el contrario le presiona en toda la cancha?. No se preocupe, tenemos la medicina adecuada para usted. Acuerdese de hacer uso de ella antes de hacer la alineación y todo resuelto. Sus defensas volveran a ser un muro infranqueable y su delantero volverá a ver la portería como la del anuncio de Casillas".Y bien que puede dar de fé ello un Circo Aragonés que se encontraba en situación crítica. Una derrota más en este SuperDuelo le daba el título a Glóbulos Rojos, y dado el poco exíto circense con sus últimas alineaciones casi nadie creía en la victoria. Pero cuando menos se contaba con él, surgió el nombre de Mariano para completar la alineación aragonesista. Si alguien tenía dudas sobre si el entendiemiento con sus nuevos compañeros iba a ser sencillo, estas dudas se disiparon pronto. Dos buenos pases en profundidad de Fidel y Felipe él los convertía en asistencias de gol. Empezar 0-2 dió alas a los hasta entonces decaídos jugadores circenses, que empezaron a jugar con una velocidad desconocida en ellos, velocidad que les permitía realizar buenos contraataques cuando esto era algo vedado para ellos en los últimos tiempos, debido a la superioridad física de Glóbulos Rojos.
Pero el partido no había hecho nada más que empezar, y Glóbulos Rojos tuvo la suerte de aprovechar un error en la salida de balón, y un extraño pase que defensa y portero dejaron llegar hasta la portería, para empatar a 2. Un nuevo tirón de los neroazzurri (2-4), era respondido por los globulinos en una jugada en la que Fran quedó K.O. al parar el balón con la cara, pero no así sus compañeros, que se repusieron y aumentaron distancias (3-6). Fueron esos los mejores minutos circenses, con unos brillantes Fidel y Felipe en defensa que hacían fácil el trabajo a sus compañeros. Sin embargo, bien por relajación, bién por empeño del rival, lo que llegó a continuación fue una ofensiva total del ejercito rojo, que subió aún más el nivel y consiguió intimidar a un rival que creyó volver al impotente estado de semanas anteriores. Los tres goles seguidos de los globulinos empataban de nuevo el partido (6-6), y sembraban las dudas en el bando aragonesista.
El problema para Glóbulos Rojos fue que no consiguió llegar a ponerse por delante en el marcador, ya que poco después de empatar, Circo Aragonés volvió a marcar y con ello a recuperar la tranquilidad. Mariano (6 goles) y David (5) siguieron perforando la meta roja con asiduidad, mientras que Carrillo y compañía se topaban con una pierna rival, una mano de Fran o un inoportuno poste (hasta 4 se contabilizaron en los últimos minutos) que impedían el gol. A pesar de que la ventaja circense oscilaba entre los 3 y 4 tantos, en ningún momento los hematíes se rindieron, e incluso llegaron a practicar una presión adelantada que les pudo costar caro si los circenses no se hubieran ofuscado en algunas claras acciones de superioridad. Sin embargo tampoco hubiera sido justa una diferencia mayor de goles entre dos equipos que jugaron un partido de los que hacen afición. Y a todo esto... ¿vuelve a haber SuperDuelo?
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