II Copa Polonio. Partido 21

Real Onez juguetea con la araña.

No sabemos cuantos partidos le quedan a la II Copa Polonio, ni si Deportivo Araña es matemáticamente campeón o no, pero lo que está claro es que sus jugadores ya están celebrando el título. En el partido 21 salieron a la pista con una falta de intensidad digna de Ronaldinho, mientras que Real Onez hizo un partido muy serio desde el primer minuto hasta el último. No sería justo culpar a un solo jugador de la derrota, pero como aquí no estamos para hacer justicia lo diremos claramente; David fue una rémora para sus compañeros. Se empieza a pensar que su amistad con Ángel 'viva el vino' le está perjudicando en su carrera deportiva, y el caso es que ayer se le vio mas perdido que a Andrés Pajares en un bufete de abogados. Cómo se vería de mal que llegó a rogar a sus compañeros que 'le pegaran un tiro' después de una ocasión malograda. El problema es que sus compañeros, aunque no estaban tan mal como él, se acabaron contagiando, y aunque hubieran deseado hacerlo es probable que no le hubieran acertado al dispararle.

Y a todo esto Real Onez jugando a placer. El hecho de contar con Víctor (del que luego hablaremos) como portero le daba tranquilidad. Desde que el goleador Sergio (hat trick) inauguró el marcador al finalizar una jugada personal, hasta que llegó el 0-4, solo hubo un equipo en la cancha. Peri y Pablo hacían y deshacían a su antojo, y Alberto creaba peligro cada vez que se acercaba a la portería rival (con un poco más de puntería habría igualado su record de seis goles). Cualquier espectador neutral que se hubiera acercado a ver el partido habría pensado que los jugadores rojos acababan de llegar de una fiesta con Arrabal y que por eso no estaban en condiciones. Pero el caso es que no estaban jugando tan mal como pudiera parecer, aunque en las dos porterías perdían la batalla. En la de Fran había una laxitud preocupante por parte de la defensa, mientras que en la de Victor y sus muchachos veían un muro infranqueable. El paso de los minutos había ido igualando el encuentro y las ocasiones arácnidas se multiplicaban. Pero aparecía la figura de un Víctor que, en uno de sus mejores partidos, evitaba que su equipo pasara apuros en el marcador parando casi todo lo que iba a portería.

Tan negro lo veía Fran que en una alocada pero exitosa decisión decidía lanzarse al ataque como un jugador más. Tampoco es que sus compañeros lo estuvieran haciendo mucho mejor de cara a puerta, así que nadie iba a recriminarle que lo intentara. Y de hecho logró marcar el 2-4 y solo Víctor evitó que hiciera también el 3-4, así que en lo que quedaba de partido siguió subiendo a jugar. Sin embargo, aunque el resto de arácnidos parecieron recuperar la moral y el nivel (salvo David, que seguía sumido en su particular infierno), Real Onez no perdonaba. En ningún momento dejó que Deportivo Araña se acercara a menos de dos goles, y la sensación era la de un equipo que dominaba el partido. El efecto portero-jugador se diluyó, y con 3-6 sonó la bocina que indicaba el teórico final del encuentro. Pero aprovechando que la pista seguía libre, los jugadores decidieron prorrogar el partido la friolera de ¡cinco minutos! en los que los arácnidos marcaron el 4-6. Sin embargo Fidel, que ya no podía chutar a portería por el dolor en su rodilla, lograba paradojicamente el 4-7 al rematar el balón en su propia portería, finalizando en ese momento el encuentro.

Incidencias.

Partido disputado el 3 de Mayo de 2008 a las 17:30 horas en la pista 13 del Barnés. El encuentro comenzó con retraso debido a que varios jugadores llegaron ligeramente tarde. A pesar de que David sabía perfectamente que aún faltaban por llegar Alberto y Víctor, cuando vio aparecer a los Jiménez por la senda, no pudo evitar mirarles a ellos y luego a su reloj repetidas veces. Mientras hacía esto su cara reflejaba un grado de satisfacción que evidenciaba que su organismo estaba en ese momento liberando endorfinas a granel.

Pero antes de que ocurriera todo esto, y mientras esperaban a la llegada de sus compañeros, los allí presentes se contagiaban de ese espíritu arrabaliano que siempre provoca la presencia de Ángel, y acababan profiriendo frases como 'viva el vino', 'vivan los Jiménez' o 'vivan los Albertos'. Está claro que la presencia de este Ortega Cano de la bicicleta siempre anima el ambiente. Nuestro icono mediático, en la previa del partido, sorprendió a todos al afirmar que siempre se le había dado bien la portería, hecho que (no) demostró poniéndose bajo los palos en el calentamiento. Eso sí, no dudó en opinar sobre el balón. ¿Os lo han regalado en el McDonalds? fue la pregunta que dejó caer a la sorprendida concurrencia, que tuvo que aclararle que ese era el balón oficial de la Copa de Europa. Lo que no queremos ni imaginar es lo que pensó este hombre cuando se decidió que el descuento fuera de solo cinco minutos, y luego resultó que ninguno de los diez jugadores tenía excesiva prisa por marcharse a casa. Seguro que muy bien no le pareció...