I SuperDuelo. Partido 3
Un minuto mágico del Capitán Araña salva a Circo Aragonés.
Al finalizar el partido más de uno no se lo acababa de creer. ¿Como era posible que un partido aparentemente ganado se perdiera en solo un minuto? Cada uno intentaba explicar los hechos a su manera. Unos hablaban de suerte, otros de calidad individual, otros comparaban al protagonista con Raúl (no estaba haciendo nada y luego marca los dos goles), y hasta se hablaba de que la diferencia entre los equipos estaba en la pegada. Incluso hubo algún sobrado que afirmaba que en realidad Circo Aragonés lo tenía todo controlado y que el gol era cuestión de tiempo (aunque no se lo creía ni el). El caso es que unos pocos minutos antes, cuando Glóbulos Rojos vencían por 1-2, si algún espectador hubiera tenido que apostar por alguien lo habría hecho por los rojos con seguridad.Pero antes de ese minuto se pudo ver un partido bastante poco lucido donde la asfixiante defensa de glóbulos abortaba la mayoría de ataques de los aragonesistas, unos jugadores a los que no les salía casi nada arriba, pero que en defensa también se aplicaban a la perfección. Estaba claro por tanto que el partido iba a ser de pocos goles, así que cuando Pablo establecía el 1-0 se podía empezar a pensar en que el equipo circense se encerraría atrás para dedicarse a buscar contraataques, fieles a su estilo. Pero no pudo ser, porque solo un minuto después del gol, Francisco batía por bajo a su tocayo blanco, y el partido volvía a comenzar, eso sí, bajo los mismos derroteros.
Todos sabían que el partido se iba a decidir por la mínima, así que cuando Alberto cazaba el rechace de Fran a tiro de Ramón y ponía el 1-2, los glóbulos parecían tener asegurado el menos el empate. Y el tiempo les estaba dando la razón, ya que aunque Circo Aragonés estaba disponendo de ocasiones cada vez mas claras, se encontraba con Victor, los palos, o el desacierto de los jugadores blancos de cara a portería. También el equipo de Ramón llegaba con peligro a la portería de Fran, pero ninguno de los dos conjuntos lograba marcar.
Hasta que faltando poco tiempo para la finalización, David recibía un balón cerca del área y con un preciso disparo batía a Victor. Y al igual que su tocayo Villa contra Bélgica, y justo en la siguiente jugada, el Capitán Araña culminaba una buena jugada de sus compañeros introduciendo el balón entre los 3 palos de Victor. A partir de ahí los rojos aumentaron su presión para lograr al menos el empate, y aunque Edu tuvo una gran ocasión para hacerlo casi al final, se encontró con que Fran logró detener su disparo con las piernas. Al final 3-2 en un partido en que ningún resultado habría sido injusto.
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