IX Liga Sevale. Partido 11
Embaucados por un puma.
“Embaucar. tr. Engañar, alucinar, prevaliéndose de la inexperiencia o candor del engañado”. Una definición la de la RAE que palidece en la comparación con el recordado discurso de Joan Laporta que muchos recordamos irremisiblemente cada vez que escuchamos el verbo embaucar. Discurso que también habría venido a la cabeza a los espectadores del undécimo partido de la IX Liga Sevale al ver la actuación de los miembros de Jurassic Club.Los jurásicos tenía en sus manos (más bien pies) dar el golpe de gracia a un campeonato del que solo les separaba un mísero empate. Su rival solo había podido ganar uno de los últimos seis partidos, y justo el día que había contado con guardameta, por lo que esta vez los oscuros, sin un portero enfrente, y recuperando al pichichi de la competición Juanba, parecían tener una misión asequible. Esto podría provocarles cierto grado de relajación, pero los pumeros fueron mucho más allá, y transformaron esa relajación en un embaucamiento permanente.
¿Cómo? Pues dando todo tipo de facilidades. Solo así se explica que, ganando 1-0, Nico subiera con portero-jugador y le pusiera en bandeja al guardameta Fran la posibilidad de empatar a uno, cómo el propio Nico, con 3-1, tuviera una penosa actuación como guardameta que provocaría la remontada oscura (3-5), o como Paco tampoco brillaría como guardameta al no impedir que un lejano pase elevado de Fran T se convirtiera en gol. Si el plan era provocar que los jurásicos vieran el partido tan fácil que lo tiraran por la borda, desde luego que cayeron en la trampa.
Su forma de defender parecía decir “No me importa que me marques goles, yo te estoy marcando más. No me importa que mi portero tenga trabajo, esa es mi ventaja con respecto a ti. No me importa que te acerques en el marcador, me vale el empate…”, hasta que llegó precisamente el empate con un 7-7 que dejó sin palabras a los jurásicos, y que convenció a los de Pumas United de que tenían la receta para ganar el partido. Acabar con los regalos atrás, y continuar los bombardeos sobre el área de unos oscuros tan incapaces de salir de la trampa, como temerosos ahora de que ese 9-12 final pueda suponer un cambio de ciclo.
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