VIII Liga Sevale. Partido 2

Un huracán asola el Barnés.

Nadie imaginaba que las fuertes rachas de viento, que esta jornada provocaron en algunas zonas de la región la alerta naranja, pudieran afectar en exceso al segundo partido de la VIII Liga Sevale. El fútbol sala no es un deporte que se vea afectado especialmente por el viento, y además las pistas están situada en una zona que suele quedar a salvo de las fuertes corrientes de aire...pero no de otro tipo de vendavales.

Y es que Glóbulos Blancos contaban con que tendrían hacer frente a los soplidos de Andrés, al que contuvieron con éxito la pasada semana, pero no esperaban que su amigo Javi fuera también otro huracán al que ya no pudieron detener. En apenas cinco minutos la pareja había generado una ciclogénesis explosiva con tres goles de tremenda factura, de esos que desmoralizan al rival y le obligan a agarrarse a la pista si no quiere salir volando.

Algo a lo que se aferraron los blancos pese a las insistentes corrientes de aire que arreciaban sobre la portería de Fran y, que de hecho acabaron desembocando en el 4-0. Pero aún así los globulinos consiguieron mantenerse en pie durante un tiempo gracias a los goles de Berni y Javi M. que equilibraban algo el encuentro (5-2), y que daban paso al único momento en que pudo haber partido. Un tres contra uno que de haber sido el 5-3 pasó a ser el ya irremontable 6-2.

A partir de ahí los blancos se hundieron en su poca puntería de cara a puerta y acabaron desfalleciendo, mientras el quinteto azul, con el viento a favor, disfrutó y se recreó en una relajación que de no haberse permitido podría haber dejado una diferencia aún mayor que ese 8-2 final.

Incidencias.

Partido disputado el 30 de Enero de 2015 a las 20:00 en la pista 12 del Barnés con unos increibles 23 grados, pese a la jornada ventosa. La elevada temperatura no puede considerarse en cualquier caso una excusa para que Ramón "preparara" el partido yéndose de comida y soplando, pero no aire, sino unas cuantas cervezas. Su juego posterior corroboró la teoría de David, quién afirmó en el post-partido que "para jugar mejor, como mucho dos quintos". Claro que siempre hay excepciones, como aquellas famosas concentraciones en el Plaza 3 de un Alberto que esperamos que pronto esté en condiciones de repetirlas.