VII Liga Sevale. Partido 3
A Los Rápidos casi se les enfría la venganza.
Los Rápidos habían llegado al tercer partido de la VII Liga Sevale con ánimo de revancha. Porque pese a que habían transcurrido dos semanas desde su derrota en el primer partido, y pese a haber logrado la victoria siete días después, el hecho de haber caído con estrépito ante un equipo sin portero seguía escociendo a unos oscuros que además presentaban exactamente la misma alineación que aquel primer día.Y no tardaron en reivindicarse jugadores como Fran T y David, que se entendieron a la perfección para convertir en letales los primeros contraataques de unos rapidianos que encontraban tantas facilidades para superar la tenue defensa mercenaria como dificultades para sacar el balón de su área.
El gol de Ramón podía quedar en anécdota ante la pegada de unos rápidos que estaban consumando su venganza (1-4), pero todo cambió cuando los colorados recordaron de qué forma habían vencido en el primer encuentro. Acogotando a su rival con una presión alta que volvió a funcionar, y convirtió en misión imposible para Fran y compañía sacar el balón jugado durante quince minutos. Los que necesitaron los mercenarios para conseguir un empate que era suficiente para ellos.
Quizá por eso con 4-4 bajaron la intensidad, o quizá fue mérito de unos oscuros que, contra todo pronostico, se rehicieron gracias a que recuperaron la solidez en defensa, y sobre todo a un demoledor Berni que disparó la ventaja hasta un 4-8 que era justo el resultado inverso al de ese primer partido. La venganza ya estaba servida, aunque transcurriría tanto tiempo (los de la siguiente hora no tenían prisa por entrar) hasta el final del encuentro que el tridente Ramón-Edu-Francisco, y el portero-jugador estuvieron a punto de enfriar demasiado una venganza que finalmente sí que pudieron paladear los oscuros (7-8).
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