IX Trofeo McDonalds. Partido 4
Los Pimentones se comen todas las galletas.
Desde que existe el fútbol los deportistas han intentado mejorar su rendimiento físico con todo tipo de sustancias más menos legales. El agua con sales minerales que toman durante el partido, los suplementos vitamínicos en los descansos, o incluso sospechosas inyecciones justo antes de saltar al terreno de juego. Lo que nunca se ha visto es que ya sobre el verde, y con el balón a punto de echar a rodar, el portero se abra un paquete de galletas de chocolate y empiece a repartir entre los futbolistas.Tenía que llegar el IX Trofeo McDonalds, en su cuarto partido, y tenía que regresar Jose a la meta pimentonera para presenciar tan inaudita situación. Y ante tal ofrecimiento unos cuantos golosos aceptaron, pero curiosamente ninguno de los jugadores telefónicos quiso tomar galletas de chocolate. Aún no sabían que acabarían comiendo otro tipo de galletas mucho más amargas...
Y no lo supieron durante buena parte del partido, concretamente la inicial, cuando bien pudieron firmar un 0-5 de salida de haber afinado la puntería. Se quedaron en un 0-2 que resultaba claramente insuficiente. Iba a ser un duelo con goles porque los guardametas estaban en modo pasen-y-vean y los defensas tampoco iban mucho más allá, tal y como quedó rápidamente demostrado.
Y aunque en plena vorágine goleadora los prepaguianos se mantenían por delante, los colorados se encontraban muy cómodos manteniendose a distancia, como ese ciclista que espera su momento para dar el hachazo. El demarraje se produjo con 4-5, justo cuando el ritmo goleador de Carlos y Álvaro se detuvo y su defensa y portero pasaron a modo viva-el-vino. Ramón se emborrachó de goles, Alberto voleó de primeras un balón cruzándolo a la escuadra, y el 9-5 supuso el fin. Un par de arreones acercaron a dos goles (9-7, 12-10) a los telefónicos, pero mucho van a tener que mejorar porque jugando así sólo pueden aspirar al torneo...de la galleta. El de la hamburguesa se les está quedando lejos (3-1).
Comentarios