I Torneo Modaba. Partido 7
Las hormigas blancas ya casi tienen su premio.
La Martialis heureka (conocida como la Hormiga de Marte debido a sus inusuales características y heureka por su sorprendente descubrimiento) es una nueva especie de hormiga descubierta en la selva amazónica cerca de Manaos, Brasil. Dos especímenes fueron descubiertos primero por Manfred Verhaagh en 2000, pero fueron disecadas y rotas antes de ser examinadas, por lo que no fue posible su verificación como una nueva especie. No fue hasta que un nuevo espécimen fuera descubierto en el 2003 por Christian Rabeling, un estudiante graduado de la Universidad de Texas, que el hallazgo salió a la luz. Conocidas solo por éstos tres especímenes, éstas hormigas no poseen ojos, son de color pálido, subterráneas y predadoras (fuente, Wikipedia).Pues eso, que ya sabéis (sabemos) que realmente existen las hormigas blancas. Lo que no saben los científicos es que no se han descubierto 3 especímenes, sino cinco. Concretamente fueron vistos disputando el séptimo partido del I torneo Modaba, y se enfrentaron a unas energéticas cigarras que, cómo en la fábula de Esopo, se las prometían muy felices tras lograr el primer tanto del encuentro. Pero muy poco les duro la alegría. Enseguida Felipe dejaba en evidencia su calidad, y a Fran, al sorprenderle con una genial vaselina, que supondría la llegada del invierno para Los Energéticos.
Éstos, ateridos, se resignaban a ver como las trabajadoras hormigas les daban hasta en el carnet de identidad. Ya os podéis imaginar a Nico marcando más veces que en el móvil, a Edu dejando en evidencia a defensa y portero a base de velocidad, y a Alfonso creando problemas con su juego de espaldas. Como dirían los Chemical Brothers, los azules estaban fuera de control, los goles les caían hasta por respirar, y además Jorge hacía lo que podía con los rectos (los de las piernas) sobrecargados.
El 6-1 parecía una losa insalvable, y realmente lo era, pero las cigarras decidieron comenzar a comportarse como hormigas, y no les fue mal. En el primer intento llegaron a ponerse 6-3, pero debido a su inconstancia y a un segurísimo Jose bajo los palos, los azules restablecieron las diferencias (8-3). El segundo intento iba más bien encaminado a reducir la derrota a la mínima expresión, pero se quedó en el 8-5. Después las cigarras volvieron a dejarse llevar por el camino de la precipitación y, como todo el mundo sabe (y sin necesidad de Wikipedia) las hormigas no cesaron en su empeño de recolectar goles hasta lograr el undécimo tanto justo después de que sonara la bocina. Acababa el partido con la máxima diferencia a su favor, y con ello el campeonato que está a solo 3 puntos para De Lorean. Un empate en el octavo partido y ¡campeones!.