VII Trofeo McDonalds. Partido 4

Es un suspenso total.

¿Cómo comprimir en cuatro párrafos el cuarto encuentro del VII Trofeo McDonalds? ¿Cómo hacerlo con algo que trascendió un simple partido de fútbol hasta acabar convirtiéndose en un curso, un master, sobre qué es este deporte y porque nos hace disfrutar (y sufrir) tanto?. Goles a mansalva (24), golazos por la escuadra, cantadas del portero, paradones sobre la raya, penaltis en las dos porterías, lesiones (por suerte leves), interrupciones de Nico (+5), polémicas por el resultado, y hasta cambios de pista.

En el aula, y ante este examen, se enfrentaban dos alumnos muy distintos sentados en sus pupitres, el aplicado pimentón, que semana tras semana repasaba las lecciones pero al que últimamente no le salían las cosas, y su rival telefónico, tan dotado para el gol (con el refuerzo además de Álvaro II) que apenas si creía conveniente repasarse el temario. A la primera pregunta Los Pimentones contestaban de forma correcta con un contraataque de manual, y justo después su rival también demostraba sus conocimientos con otra contra de libro (1-1). Las siguientes cuestiones eran justo las que los colorados mejor llevaban preparadas, las referidas al juego veloz, y hasta el otras veces embarullado a la hora responder Nico parecía tan iluminado como sus compañeros, acertando por la escuadra hasta cuando parecía haberse equivocado. Ni un error en las seis primeras preguntas rojas, mientras que los confundidos azules apenas si habían garabateado alguna otra respuesta (6-2). Durante el poco tiempo que Los Pimentones se detuvieron a repasar que no habían cometido faltas de ortografía se apreció algo de igualdad, pero apenas fue un paréntesis.

Porque por entonces el examen de Los Prepago sólo podía calificarse con la palabra desastre, y toda su entrega en responder resultaba inútil ante un rival que resolvía ahora las cuestiones sobre el juego estático sin fallar ni una sola pregunta. Estaba a punto de sonar la bocina que indicaba el final del examen y los del Ramón lo entregaban con el 10 asegurado, mientras que el mal estudiante telefónico mejoraba al final y al menos salvaba el aprobado (10-5).

Pero entonces se abrió una nueva convocatoria en la pista 13 que iba a estar disponible hasta las 10, y fue ahí cuando Los Prepago vieron su oportunidad de aprobar en Septiembre, proponiendo a Nico y compañía continuar el juego con el resultado actual. La polémica estaba servida, ya que estos se amparaban en la legalidad de que el partido dura 60 minutos y preferían conservar su matrícula de honor aunque les costara ser acusados de cobardes, proponiendo disputar una pachanga. Comenzaba así un nuevo partido que de amistoso iba a tener poco. Los azules ansiaban devolver la goleada recibida, y tan radical fue su mejoría que lo lograban en apenas media hora (7-2) provocando la retirada de los rojos del campo. Una nueva polémica estaba servida por la retirada, y porque Ángel y sus compañeros reclamaban que ese segundo partido también debería contar como victoria para ellos. Que decida el tribunal examinador...

Incidencias.

Partido disputado el 11 de Febrero de 2013 a las 20:00 horas en la pista 11 del Barnés, y también en la 13, en la que hacía mucho que no se jugaba, y en la que comenzaron, hace ya unos cuantos años, esos primeros duelos que han desembocado en todo esto. Nada menos que 304 encuentros ha disputado un Fran que, desde que es tricentenario, sale a golpe por partido. Tras lo del Lunes, y el Viernes, en esta ocasión encajó un balonazo en el ojo, y después otro en la boca aunque, por mucho que lo intente, no podrá alcanzar a Nico y a sus zapatillas, como principal interruptor de partidos. Nico, ¡velcro!..